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domingo, 23 de diciembre de 2018

Avilés se juega la “vida” frente a Destroyers

Avilés Industrial encarará la última oportunidad que tiene de subir al profesionalismo cuando enfrente a Destroyers este domingo, desde las (15:30), en el estadio IV Centenario, donde se dará el choque de ida por el ascenso-descenso indirecto de categoría.

Como vicecampeón de la Copa Simón Bolívar, Avilés Industrial tiene la opción de jugar contra Destroyers, penúltimo en la tabla acumulada de la División Profesional, y tiene la ventaja de actuar en condición de local.

El representativo tarijeño pudo ascender de manera directa, pero Always Ready (La Paz) se repuso y volteó la llave de la final a su favor. En la ida, Avilés Industrial ganó por la mínima diferencia, en su visita a El Alto la pasó mal (0-5) y en el tercer compromiso, en Cochabamba, el cuadro paceño se impuso por 3-0.

El elenco de Avilés Industrial encara estos cotejos finales con los últimos recursos que le quedan, ya que gastó todo en su participación en la Copa Simón Bolívar, con los viajes y pagos de sueldos, y con esta limitante recibirá a los cuchuquís en un partido inédito.

Durante la Copa Simón Bolívar, Avilés Industrial fue la sensación porque en su primera campaña logró llegar a la final y tratará de dar otra sorpresa frente a un elenco del profesionalismo.

Destroyers por su parte se salvó de caer en el indirecto, cerró su participación en el torneo Clausura con una marca de 15 partidos seguidos sin ganar. Este año, el elenco amarillo regresó a la primera categoría, luego de 11 años de ausencia, y de nuevo está en peligro su permanencia.

El presidente de la entidad, Robert Blanco, comprometió un premio económico a los jugadores en caso de salvar la categoría y esa oferta sigue en pie. La delegación se trasladó en un vuelo chárter desde la capital cruceña con la ilusión de obtener, al menos, un empate para colocar un pie fuera de la zona de peligro. El árbitro Luis Irusta (La Paz) controlará las acciones del partido y estará asistido desde los costados por Reluy Vallejos y Rubén Flores.


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