Cuando parecía que el espectáculo había terminado y la crónica del Nacional B entre Ciclón y Bermejo se cerraba, un altercado se suscitó en las tribunas donde simpatizantes de Ciclón se dirgieron al sector donde se apostó la afición bermejeña. Hubo piedras de por medio (fue lo peor de la situación) y para suerte de los niños y mujeres que estaban en la recta de general, el incidente no pasó a mayores.
La policía actuó identificando a los incitadores del conflicto y resguardó a la hinchada azucarera por el medio del campo de juego para que luego pudieran salir por el sector de preferencia. De todos modos, la cantidad de efectivos no iba en relación a la de gente inmersa en el conflicto. Un hecho curioso fue que el público que ingresó al gramado del IV Centenario, aprovechó para sacarse fotografías con sus ídolos. El más cotizado fue el brasileño Wellintong Martins.
Si bien la policía actuó y los desbordes no pasaron a mayores, esta debe ser una situación que se debe tomar en cuenta de cara el próximo compromiso de local que afrontará Atlético Ciclón. Será dentro de casi tres semanas ante 10 de Noviembre de Potosí, en un cotejo que significará la conclusión de la fase de grupos y donde los albicelestes sabrán su situación de cara a la clasificación a una siguiente ronda.
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